Los mercados de valores revisten de enorme peso en cuanto a economía se refiere, ya que es mediante ellos que los empresarios pueden expandir las opciones de invertir y establecer su compañía en otro país. Es así que al crecer estos mercados hay una mayor demanda de los llamados productos intermedios, así como hay mayores servicios y aumenta el empleo. Todo esto tiene un impacto positivo en la economía, al tiempo que los mercados son espacios de oportunidad para inversionistas en donde pueden participar y aumentar su capital. Sin embargo, la actividad de los mercados puede verse afectada con los acontecimientos políticos que ocurren todos los días, teniendo más impacto unos que otros. Vivimos en un mundo global e interconectado, por lo que aquello que afecta a un país, afecta no solo a otro, sino a muchos más.
Guerras y conflictos políticos: su impacto en finanzas y economía
De acuerdo con Deutsche Bank, ante la presencia de conflictos globales, hay un temor generalizado por la incertidumbre por parte de los inversionistas. No obstante, pueden pasar unas tres semanas en tener una recuperación a como estaban antes de la crisis. Si bien existe una volatilidad por parte de los parqués y operadores de Bolsa, en donde se refugian en los activos refugio (como el oro), puede haber un punto de quiebre, pero de ahí solo queda subir y recuperarse.
Una prueba de ello es la invasión rusa a Ucrania, en donde se espera que ocurra esa recuperación, aunque hay que estar pendiente de que no sorprenda la inflación. Incluso en conflictos de la talla de la Segunda Guerra Mundial, las empresas de mayor capitalización en Wall Street subieron (en ese conflicto llegó casi al 17 %). La sensación actual es que aunque aumenten los precios del petróleo y haya una recesión, suele ser breve. Los expertos más bien apuntan que hay que poner mucha atención a los acontecimientos que siguen al término de los conflictos.
¿Hay recuperación en los mercados aún con incertidumbre política y guerra?
Los analistas apuntan a que sí. Incluso en el caso de conflictos globales como los que estamos viviendo en estos tiempos, en donde hay una gran volatilidad y caídas, esto no es permanente. Después de semanas o unos meses más tarde suele haber un camino, una salida, en donde no solo hay recuperación de los índices previos, sino que se consigue repuntar. Por ejemplo, el evento geopolítico de mayor duración no fue durante la Segunda Guerra Mundial (la recuperación del índice S&P500 fue de 745 días), sino de la Guerra árabe-israelí con el embargo de crudo en los 70, en donde la recuperación llevó 1.475 días. En contraparte, la Primavera Árabe tardó únicamente tres días y sobre la pandemia, fue de 5 meses.
Si bien ahora pudiese preocupar que los hidrocarburos nuevamente están involucrados en este actual conflicto geopolítico, hay que considerar otros factores. Para empezar, como apuntan los analistas, el mercado no es el mismo de los 40 o de los 70, los actores políticos son otros, así como el acceso a la información. Esto sin duda favorece la recuperación de los mercados, aunque no hay que confiarse en demasía cuando una situación de esta naturaleza involucra el suministro de materias primas, como lo hemos visto a últimas fechas. Son cada vez más las empresas que han cortado lazos con Rusia y la propia Bolsa de Moscú ha cerrado y el rublo se ha desplomado.
¿Cuál es el futuro de la situación actual política y qué pasará con los mercados?
Aunque en la actualidad la situación parezca un tanto incierta, más temprano que tarde el tema geopolítico tendrá que aclararse porque habrá un rumbo hacia el cual se vislumbrará la salida. Esto se traduce en que el rebote ocurrirá de manera pronta, claro, no es una situación exenta de riesgos, a resultas de las actuales alzas de los precios y de los tipos de interés.
Dentro de las estrategias a realizar ante este tipo de incertidumbres, tanto de la política internacional como de la nacional, los inversores aconsejan “aislarse del exceso de información” para la toma de decisiones y evitar el nerviosismo que lleve a tomar un derrotero indeseado. Deben aprender a gestionar la incertidumbre y estar preparados para lo que venga. A fin de cuentas, además de analizar, deben enfocarse a lo que se espera a largo plazo y aprovechar el momento de volatilidad presente y que es generada por esa incertidumbre política.
Otra de las estrategias recomendadas por los inversores, es poner el foco en aquellas compañías que aporten valor y calidad. Además, frente a la volatilidad y el riesgo, otra recomendación es protegerse con los seguros que ofrecen las opciones sobre diferentes activos, divisas fuertes, bonos de alta calidad, etc. Todo esto apunta a que, si bien la exportación pareciera verse afectada en estos tiempos, no es momento de frenarla, sino de afianzarla.
Confianza ante la incertidumbre geopolítica y los mercados financieros
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