Cada vez resulta más esencial la internacionalización de las empresas para asegurar su desarrollo y éxito. Nos encontramos en un mundo tan globalizado que, si no damos el paso hacia la internacionalización, es probable que estemos limitando las posibilidades de nuestro propio proyecto.
¿Qué beneficios ofrece el comercio internacional para las empresas?
La internacionalización del comercio implica, entre otras cosas, un impulso productivo para el país y para la empresa, además de un mayor número de vacantes de empleos y un incremento en la estabilidad económica y en el bienestar social.
Acceso a materias primas
La internacionalización permite un mayor acceso a materias primas, lo cual puede suponer una mayor calidad de los productos, un coste más reducido o el abastecimiento de un socio comercial en situaciones políticas complicadas, entre otros ejemplos. La posibilidad de acceder a nuevos productores importantes será toda una oportunidad para tu negocio.
Por otro lado, también existe la posibilidad de ni siquiera tener un acceso local a ciertos productos, siendo el comercio internacional la única vía para acceder a ellos.
Ventaja competitiva
El hecho de situar nuestro producto o servicio en el exterior puede resultar una gran ventaja competitiva frente a otras empresas del sector. Además, en caso de que nuestra fortaleza esté asociada a características de nuestro país, esto puede ser una gran oportunidad para la atracción de clientes extranjeros hacia nuestro negocio.
Asimismo, expandiendo tu negocio, tienes la oportunidad de potenciar tu marca en otros países en los que tus competidores no han llegado aún. El acceso a nuevos mercados, te permite innovar y optimizar tus servicios.
Disminución de costes de producción
La producción a gran escala, el acceso a recursos y materias primas a un precio más reducido, permite reducir los costes de producción, abriendo la posibilidad de ofrecer mejores precios y calidades a los consumidores.
Comercialización de productos excedentes
Cuando la producción de algún producto excede la demanda local, el comercio internacional permite comercializar dichos productos en otros mercados extranjeros, lo cual favorece a la propia empresa y a los consumidores de otros países, que se benefician de precios más asequibles.
Reputación
Aunque resulte difícil de cuantificar el éxito de una empresa en cuanto a reputación, está demostrado que aquellas empresas que hacen negocios en otros países mejoran su reputación de cara al público local y al externo. El éxito que se asocia a la internacionalización generará una mayor confianza frente a los consumidores.
¿Cómo internacionalizar una empresa?
Quedan claros los beneficios de internacionalizar una empresa, pero este no es un proceso que se deba iniciar sin cumplir con ciertos requisitos.
Conocimiento previo de la empresa
Realizar un análisis interno de la empresa, observando sus fortalezas y debilidades, es imprescindible antes de comenzar cualquier cambio. En el caso de un proceso de internacionalización, habrá que analizar si la empresa podrá cumplir con las demandas del nuevo mercado en el que se adentra y cuáles son las grandes fortalezas a potenciar.
Viabilidad del producto en el mercado internacional
No todos los productos tienen las mismas oportunidades en el mercado internacional, por eso hay que prestar atención a los países en los que tendrá más o menos éxito o cuáles son tus clientes potenciales. Para ello, es recomendable hacer un estudio previo de la opinión pública sobre nuestro negocio. De esta manera, podremos localizar nuestro público objetivo.
Análisis exhaustivo de la competencia
Expandirse a nuevos mercados significa nuevas oportunidades y nuevos clientes, pero también nuevos competidores. Por eso es tan importante conocer muy bien a la competencia para saber cuál es el mejor valor diferencial que potenciar.
Prevención de riesgos
Para cualquier proceso de internacionalización, toda acción requiere una inversión, lo cual supone que los beneficios no se obtengan en un largo periodo. Por ello, esta estrategia requiere de un margen con el que contar ante posibles problemas.
Este plan de prevención también es necesario para saber si se necesitan agentes externos para realizar las exportaciones o importaciones, o si, por el contrario, la empresa es autosuficiente para iniciar el proyecto.
Prepara un plan de internacionalización
Todos los apartados anteriores podrían formar parte de un plan bien definido de internacionalización. Es un documento que recoge la estrategia a seguir en la expansión hacia mercados exteriores.
En un plan de expansión, se encontrarán los objetivos, el análisis interno y externo, los productos, las acciones a llevar a cabo y el estudio de los riesgos, entre otros asuntos.
Abre tu empresa al mercado internacional con ayuda de profesionales
Si decides optar por la internacionalización, no comiences el proceso sin la información previa necesaria. Para hacerlo de la manera más correcta, contar con una asesoría de exportación te ahorrará muchos problemas.
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